Consejos para el cuidado de la tostadora
Todos sabemos que la tostadora nos ayuda a crear unos deliciosos desayunos pero el secreto reside en que tu electrodoméstico se encuentre en buen estado para aprovechar al máximo su potencial.
Es importante considerar que habrá una acumulación constante de migas de pan las cuales se irán quemando poco a poco con cada uso, alterando el resultado de las tostadas y desprendiendo humo en muchas ocasiones y en consecuencia generando un desagradable olor a quemado.
Pero puedes evitarlo si realizas un mantenimiento periódico a tu tostadora. Tan sólo con una limpieza básica al terminar su uso, ayudarás a evitar la acumulación excesiva de pan y podrás tener tu aparato como nuevo, prolongando así su vida útil.
Limpieza profunda
Para limpiar a fondo tu tostadora primero desconéctala de la corriente para evitar accidentes, y durante la limpieza nunca lo sumerjas en agua.
Toma un cepillo de dientes viejo que se encuentre completamente seco y barre el interior de la tostadora con cuidado, para que las migas que hayan quedado atrapadas vayan cayendo dentro de la bandeja inferior.
A continuación libera la bandeja inferior del exceso de migas y lávala bien con una esponja y jabón líquido para eliminar los restos. Ahora vuelca la tostadora y sacúdela un poco para eliminar cualquier residuo restante que no haya caído sobre la bandeja.
Por último puedes limpiar el exterior con un trapo húmedo y un 'chorrito' de vinagre para mantener el brillo, en caso de que sea de plástico. Pero si el material de la tostadora es acero inoxidable preferiblemente completa este paso con limpiacristales.